Fulgencio Gil propone declarar el casco histórico como “Zona Franca”, con exenciones y bonificaciones fiscales especiales para el comercio y la hostelería

• El presidente del PP afirma que “hacemos nuestras las demandas de Ceclor y Cámara de Comercio y proponemos recuperar la bonificación del IBI y exención en 2020 para los comerciantes, hosteleros y empresas afectadas por la crisis, exención de tasas durante 2021 a los vendedores del mercado y hosteleros, así como bonificación de la tasa de basura.

Fulgencio Gil propone declarar el casco histórico como “Zona Franca”, con exenciones y bonificaciones fiscales especiales para el comercio y la hostelería
Fulgencio Gil propone declarar el casco histórico como “Zona Franca”, con exenciones y bonificaciones fiscales especiales para el comercio y la hostelería

Fulgencio Gil propone declarar el casco histórico como “Zona Franca”, con exenciones y bonificaciones fiscales especiales para el comercio y la hostelería

 

• El presidente del PP afirma que “hacemos nuestras las demandas de Ceclor y Cámara de Comercio y proponemos recuperar la bonificación del IBI y exención en 2020 para los comerciantes, hosteleros y empresas afectadas por la crisis, exención de tasas durante 2021 a los vendedores del mercado y hosteleros, así como bonificación de la tasa de basura.

 

5 octubre, 2020.- El portavoz del Partido Popular en el ayuntamiento de Lorca, Fulgencio Gil, ha propuesto que se otorgue la calificación de “Zona Franca” al casco histórico, lo que conllevaría la concesión de una batería de bonificaciones fiscales que incentiven la apertura de nuevos establecimientos comerciales y hosteleros. Se trata de una propuesta que, junto a las demandas incluidas en el PLAN LORCA RESPONDE de medidas para ayudar a nuestro tejido productivo, persigue la regeneración económica y la activación social del casco histórico.

 

            Es una propuesta valiente y responsable, que responde a las necesidades que presenta nuestro casco histórico y promovería la apertura de nuevos establecimientos que llenaran de vida estas calles y revitalizaran calles como Corredera, Alporchones, Lope Gisbert o la plaza de San Vicente. Se trata, también, de prevenir los efectos de la crisis económica que trae consigo la pandemia del Covid-19.

 

            Fulgencio Gil ha adelantado que el objetivo es que cualquiera persona que quiere emprender un negocio en el casco histórico, pueda hacerlo de forma inmediata, sin trabas y con incentivos fiscales. La protección del casco histórico bajo esta catalogación contemplaría la aplicación inmediata de ventajas fiscales que permitan liberar de cargas a toda aquella persona o empresa que quiera abrir un negocio en esta área. Entre estas ayudas podemos señalar, entre otras, las siguientes:

  • Bonificación del 75% del IBI durante 3 años para los propietarios de locales que estén actualmente cerrados pero reabran para acoger un establecimiento comercial u hostelero.
  • Bonificación del 75% del importe de los recibos de agua y limpieza viaria.
  • Exención de las tasas municipales, tales como ICIO o licencia de apertura.
  • Puesta en marcha de una línea de subvenciones para la adecuación de nuevos negocios.
  • Desbloquear la más que necesaria flexibilización de la normativa urbanística para esta zona que emprendió el Partido Popular, pero que el actual gobierno local ha paralizado.
  • Refuerzo de la atención que se presta por parte de la empresa municipal de limpieza, Limusa, con la activación de un servicio especialmente reservado para la desinfección y limpieza del casco histórico.
  • Puesta en marcha de un servicio municipal que elabore un catálogo de locales disponibles, accesible a través de internet, de tal forma que cualquier persona interesada en abrir un negocio en el casco histórico tenga acceso directo a la oferta existente.
  • Simplificación administrativa de todos los trámites necesarios para la apertura de un negocio en el casco histórico, y posibilidad de completarlos vía telemática.

 

El ayuntamiento tiene ahora más dinero que nunca, y además, como han señalado desde Ceclor y Cámara de Comercio hace unos días, se va a suspender la regla de gasto que hasta este año limitaba las posibilidades económicas del consistorio municipal. Las cifras que ahora presentan las cuentas municipales hablan por sí solas: contamos con un superávit de 6,5 millones de euros y más de 12 millones de euros en tesorería, gracias a la buena gestión desarrollada por el Partido Popular a lo largo de nuestros años de gobierno, que también logró recortar la deuda municipal en más de 71 millones de euros, pasando de 105,4 a 34. 

 

La buena salud de las arcas municipales, y los recursos disponibles los conseguimos con el respaldo de la sociedad lorquina, y ahora tienen que repercutir en el bolsillo de los ciudadanos, porque es ante estas circunstancias cuando la gente lo necesita. Desde el municipalismo tenemos que reflejar nuestro compromiso con las personas ante los problemas que atraviesan, concretándolo con la consecución de una bajada general de los impuestos y tasas municipales.

 

El consistorio sigue almacenando ahorro diariamente en las arcas municipales por la suspensión masiva de eventos como Semana Santa, Feria Chica, conciertos, programaciones culturales, fiestas de todos los barrios y pedanías, Feria y Fiestas de septiembre, entre otros.

 

            El año pasado el actual alcalde “vendió” como “gran esfuerzo municipal” que, supuestamente, las ordenanzas fiscales permitían un ahorro de 400.000 euros, y a los pocos meses se ha gastado 800.000 en comprar coches. Si han tenido dinero para gastarse 800.000 euros en comprar coches, también tiene que haber para ayudar a la gente. Sería impensable e irresponsable que el borrador de las próximas ordenanzas fiscales fuera similar al del año pasado, algo que nos impediría apoyarlas.

 

Los incentivos fiscales que proponemos se suman a la línea de ayudas directas de hasta 2.000 euros a los hosteleros, comerciantes y autónomos lorquinos que hemos logrado sacar adelante. Se trata de una de las propuestas que ya pusimos sobre la mesa el pasado mes de mayo dentro de nuestro PLAN LORCA RESPONDE, pero que se encontró con el incomprensible obstruccionismo del PSOE.

 

            Fulgencio Gil ha respaldado punto por punto las peticiones de Ceclor y Cámara de Comercio, y ha propuesto que sean incorporadas en las próximas ordenanzas fiscales. Estas medidas que exigimos que sean asumidas inmediatamente por el ayuntamiento son;

  1. Recuperar la bonificación del 50%, suprimida por el PSOE de Pedro Sánchez y Diego José Mateos, lo que ha supuesto una pérdida de 7,5 millones de euros para los lorquinos.
  2. Exención del pago del IBI para 2020 a los comerciantes, hosteleros y empresas afectadas por la crisis económica derivada de la sanitaria.
  3. Exención para 2021 del pago de las tasas de ocupación de vía pública de terrazas y mercados para los profesionales que ejercen estas actividades.
  4. Bonificación de la tasa de basuras y el sello del coche a los propietarios de vehículos afectos a la actividad empresarial de los sectores afectados.

 

La sociedad lorquina ha despertado ante la inoperancia del actual gobierno local. Ceclor y Cámara de Comercio, como ejemplo más reciente, han reclamado que “se pongan en marcha exenciones fiscales para que sea atractivo invertir en Lorca”, una idea que coincide con nuestras propuestas. Desde el Partido Popular hacemos nuestras estas peticiones sensatas y factibles, y es evidente que estamos en la misma línea, porque concuerdan con las propuestas incluidas en el PLAN LORCA RESPONDE que presentamos hace ya 5 meses y medio y que fue rechazado por el actual gobierno local.