El PP reclama que se amplíe el número de trabajadores para la limpieza de las calles en la ciudad y pedanías en vez de contratar más “jefes” para Limusa

El PP reclama que se amplíe el número de trabajadores para la limpieza de las calles en la ciudad y pedanías en vez de contratar más “jefes” para Limusa

• Las continuas denuncias de los vecinos deberían haber hecho reflexionar a los responsables políticos de la empresa, porque es evidente que las calles están hoy más sucias que nunca pese a que los operarios han tenido que redoblar esfuerzos.

2 diciembre, 2022.- No compartimos la gestión que está haciendo el actual gobierno local de los recursos con los que cuenta la empresa municipal de limpieza LIMUSA. Hasta el momento hemos tenido oportunidad de expresar nuestro punto de vista sobre las manifiestas negligencias de sus responsables políticos, que hace tiempo abandonaron las verdaderas tareas relacionadas con la administración de la empresa. Ahora tenemos que poner de manifiesto nuestra opinión sobre las equivocadas decisiones que siguen tomando, en este caso relacionadas con la gestión de las plazas de trabajadores de las que dispone Limusa.

            Todos los lorquinos tenemos meridianamente claro que el objetivo prioritario de Limusa pasa indefectiblemente por conseguir calles más limpias, ofreciendo un servicio cada vez mejor, más moderno eficaz y efectivo. Está claro que la llegada del PSOE a la alcaldía en nuestro municipio ha supuesto un retroceso en el estado general de limpieza de nuestras calles, y también se han visto afectados en el mismo sentido la atención a nuestras pedanías e incluso la frecuencia en la recogida de los contenedores, entre otras cuestiones.

            Los propios vecinos afectados, tanto del casco urbano, como de barrios y pedanías vienen denunciando desde hace años el empeoramiento gradual de la limpieza de espacios urbanos. Hemos de destacar que somos conscientes del notable esfuerzo que se está llevando a cabo de forma general por parte de los trabajadores de este servicio. Se ha dejado caer sobre ellos todo el peso de la empresa, pero no se les dota del material que precisan, puesto que la modernización y sustitución de maquinaria brilla por su ausencia.

            Lo que los ciudadanos están pudiendo comprobar tras estos 3 años y medio es que pagan más impuestos que antes, pero reciben peor servicio. Sus calles, plazas y parques están más sucios que antes. Los responsables políticos se desentendieron de la empresa en 2019 y este es el nefasto resultado. Las necesidades de limpieza en nuestro municipio tienen que ser cubiertas con la efectividad que los vecinos merecen. Para ello es obvio que Limusa tendría que haber adecuado el número de operarios de limpieza en la calle a las necesidades del municipio. Sin embargo, no han hecho nada al respecto, con la consecuente sobrecarga a los actuales trabajadores.

            Lejos de asumir su error y poner solución a la problemática que todos los lorquinos constatan, no se ha realizado ninguna incorporación en este sentido. Para mañana han convocado una reunión del Consejo de Administración en la que no se prevé ninguna nueva plaza o implementación del servicio de limpieza en las calles, otra oportunidad perdida para intentar solucionar el problema que están provocando. No compartimos en absoluto su forma de gestionar, puesto que, en vez de rectificar, insisten en su fallo. Podemos entender, como es normal, que también se dote a otras áreas de la empresa de personal o recursos necesarios para el correcto desempeño de los servicios, pero es obvio que, si no se responde a la prioritaria necesidad de mejorar la limpieza de las calles, no se está caminando en la dirección correcta.

            Proponer, por ejemplo, la contratación de un Jefe de Producción del Centro de Gestión de Residuos, una plaza de nueva incorporación, debería plantearse cuando se amplíe la plantilla de limpieza viaria, que es lo que todos los lorquinos necesitan. Dicho de otro modo y de forma más coloquial, todos sabemos excepto el Sr Mateos, que no necesitamos una Limusa en la que termine habiendo más “jefes” que “indios”, sino todo lo contrario, un servicio muy potente y más amplio que permita ofrecer a esta ciudad calles y plazas en perfecto estado de revista.